Tarta Tatin

Precalentamos el horno a 200ºC con calor arriba y abajo, pelamos las manzanas y las cortamos en cuartos, y eso cuartos en dos partes más cada uno. Cogemos una sartén antiadherente de 22 cm de diámetro que posteriormente podamos meter al horno (sin nada de plástico) la ponemos a fuego medio, añadimos al mantequilla y dejamos que se funda. Añadimos el azúcar y lo removemos con el simple movimiento de la sartén, nada de otros utensilios, sino corréis el riesgo de que se cristalice y cree pegotes de caramelo. Cuando tengamos el caramelo listo ponemos la sartén a fuego bajo, vamos colocando encima las manzanas cortadas con mucho cuidado de no quemaros y bien colocadas ya que sera como después se vea la tarta. Añadimos la ralladura de naranja por encima y dejamos cocinar sobre 2-3 minutos y retiramos del fuego. Estiramos la masa de hojaldre y las pinchamos con ayuda de un tenedor un poco, cubrimos nuestra manzanas con el hojaldre y con ayuda del mango de una cuchara de madera vamos empujando los bordes suavemente para que la masa arrope las manzanas. Pintamos con la yema de huevo la masa de hojaldre con ayuda de un pincel, introducimos en el horno y dejaremos 20-30 minutos aproximadamente hasta que el hojaldre esté dorado. Retiramos del horno, dejamos asentar durante 1-2 minutos y desmoldamos enseguida para que el caramelo no se endurezca, tan sencillo como colocar un plato encima de la sartén y con mucha decisión dar la vuelta a las sartén sobre el plato como si de una tortilla se tratase.

A esta tarta le va muy bien una bola de helado de vainilla o un pegote de nata montada.